Néstor fue rescatado junto a su madre, Troya, y sus hermanos, todavía lactantes. Ahora que ya ha crecido, y nos ha demostrado que es un perro fantástico, buscamos a su familia humana.
Es muy sociable, y le gusta estar con otros perros, jugando, correteando y disfrutando. Pero también es un pelín tímido, y hay que darle tiempo y espacio, para que coja confianza. Para ellos, llegar a un entorno nuevo y desconocido, con personas que apenas conocen, puede ser desconcertante. Por eso hay que respetar sus ritmos, entenderlos y acompañarlos en su adaptación. Con este pequeño truco, el resultado será fantástico.
Néstor es muy divertido y especialmente juguetón. Es todavía muy jovencito, y será el compañero perfecto para alguien con ganas de movimiento y acción, y sobre todo, de pasarlo bien.